De parásitas y mochileras.

Cuando encuentro un lugar como este en la sierra de Collserola, en Barcelona, la verdad es que me encuentro algo dividido emocionalmente...

 

 

Porque debajo de esas piedras puede haber un montón de cosas, entre ellas estas dos:

 

 

Y, la verdad, no sé qué me gusta más, si encontrar Plagiolepis xene (la de la izquierda), o esos "ácaros mochila" rojos que montan sobre las obreras de Plagiolepis pygmaea cual Don Quijotes a Rocinante (o Sancho Panzas al burro, es cuestión de gustos). Que sí, que sí, que la xene es la xene, pero mirad los ácaros cómo se agarran...

 

 

En esta foto puede parecer que lo hacen con las patas, pero cuando los ves vivos, sólo se sujetan al borde del pronoto, y levantan las patas mientras la obrera de Plagiolepis se va moviendo de aquí para allá..

Evidentemente, esos ácaros son bastante más frecuentes por allá que las xene...

Por cierto que a los ácaros se le ven solamente 3 pares de patas... ¿No son adultos aún, o es que el 4º par es pequeño y está junto a las piezas bucales? ¡Cualquier aclaración sobre esto (y sobre cualquier otra cosa, vamos), será bienvenida!